3.1.07

Año nuevo vida nueva.



A la enanita cada día le gustan más sus hábitos, ayer comenzó en la guardería a su hora. Allí estuvo animada y juguetona, como dice la monitora, al llegar "la hora feliz" (la de la galleta), es la que más rápido muestra su desmesurado interés por los dulces.
Por la tarde fuimos a junto del cartero real, pero creo que nos hizo más gracia a los adultos que a los niños. Se notaba que la niña estaba muy apagada y tristona. Al llegar a casa, le puse el termometro 38,7 de fiebre, enseguida le dimos un poco de dalsy y a dormir un rato en el colito.
Cuando despertó ya estaba mejor, ¡que rápido se recuperan los pequerrechos!. Durante el baño, sólo hay que ver las fotos, se lo paso pipa y después me agarraba de la mano y me pedía andar. Recorrimos la casa mogollón de veces hasta que se cansó y la acostamos. Durmió toda la noche seguida hasta las seis que se despertó por la tos.
A pesar de estar pochiña, esta claro que es un solete que nos llena de alegría a todos.
Para este año nos hemos prometido cambios en su vida, estamos estudiando la fórmula para que pase más tiempo con nosotros, cambiando horarios y compaginando el trabajo en casa con la oficina. Además para primavera comenzará las clases de natación y ahora pensamos llevarla a la nieve.
Este año 2007 va ser el año de los grandes cambios, creemos que es el momento de cambiar nuestra aptitud en general, ahora que la niña comienza a entender todo, es el momento de situarla en su lugar, en su espacio. Que siempre sepa dónde y con quién está y debe de estar. Aunque todo esto parecen reflexiones inconexas, sobre los apectos educacionales de nuestra hija hablamos mucho y tenemos claro que nuestra mayor función es educarla, facilitarle el camino para su futuro y protegerla. Menudo es el padre con su hija, quien los conoce siempre dice, que jamás conoció una niña tan apegada a su padre, pero la realidad es que la niña nota que la prioridad de su papi es ella y responde superando sus expetactivas.

No hay comentarios: