22.5.07

Ser una teixugueira


Desde que llegamos a Vigo en el 2001 decidimos que era mejor comprar que seguir pagando alquiler. Fueron años viviendo de prestado y el mayor problema que tiene es la falta de seguridad, si al dueño se le casa una hija, si decide vender su piso,... te tienes que marchar sin ni siquiera derecho al pataleo.


Durante años nos hartamos de ver pisos, es increible las cosas que te pueden llegar a enseñar. Vimos pisos de 100 metros por veinte millones, claro un quinto con entresuelo sin ancensor y por dentro todo entero para tirar, por diez millones ,que tres años más tarde seguía sin vender pero pedían dieciseis millones, no más de 30 metros cuadrados eso si con una habitación independiente, llegamos incluso a ver un apartamento sin ventanas sólo tenía una rendija que daba a un patio interior, era para ventilar nos dijo la dueña. El mercado es tan brutal que admite todo. Y el tema garajes ,eso es lo más fascinante de Vigo, pisos amplios que valen menos que estudios de 25 metros simplemente por tener una plaza de aparcamiento.


Al final, en el año 2003 decidimos arriesgarnos y adquirir una vivienda en construción en el Pau de Navia. Cada vez que lo pienso, me digo a mi misma menuda osadía. Nuestra estabilidad laboral pendía de un hilo y como dice mi madre los males nunca vienen solos, una enfermedad hizo que comprar esa vivienda fuera un verdadero infierno. Durante cuatro años pagabamos unos 400 euros mes y a parte un alquiler. Nadie se puede imaginar lo dificil que era llegar a día quince ya no digo a final de mes. Tuvimos momentos que pensamos en tirar la toalla, es más incluso llegamos a hablar con posibles compradores. No nos excedimos en nada, nada de cine, nada de cenas, nada de vicios...., la gente nos miraban con extrañeza, vivir con lo justo para algunos era un signo de rareza, eras un jipi (que no tiene nada de malo), socialmente no participas, ni te compras una tele de plasma de 20 pulgadas, ni el último modelo de DV .Para ahorrar deje de fumar, de dos paquetes de tabaco diarios a cero.


De vez en cuando ibamos a ver el terreno vacio, de repente aparecieron las aceras y el primer edificio, el Pau comenzaba a tener forma y se dibujaba como un lugar con futuro.


Nació mi pequeño polvoron y por fin, nos entregaron las llaves. Y firmamos una hipoteca por años mil, pero que importa, era nuestra casa y nuestra hipoteca, hasta eso nos pareció maravilloso. Fue la primera vez que tuvimos la sensación de pertencer a un sitio. En cuanto salimos del notario nos fuimos al piso vacio con la cria y un potito, sacamos un montón de fotos, había que inmortalizar aquel momento. Si por nosotros fuera nos hubieramos quedado allí, sin sillón, sin nevera ni televisión ..., aquellas cuatro paredes nos habían costado mucho, mucho.... No es lógico que en las VPA tengas que pagar el 20% antes de la entrega de llaves. Pero LO HABÍAMOS CONSEGUIDO.


Dentro de poco se celebrará nuestro primer año de vida en el Pau y nos encanta. El polvoron es una teixugueira total, en cuanto bajamos la cuesta de entrada se pone nerviosa de alegría. Nuestro piso nos gusta, incluso los espacios de los que desconfiamos en plano, como el office o la zona lavadero que descubrimos que son de lo más útil. Tenemos un salón lo suficientemente grande para ser un buen parque de juegos, es muy luminoso y lo mejor de todo está perfectamente insonorizado, tengo doscientos y pico vecinos y no me entero.


Pienso en el barrio como un lugar para vivir pero especialmente en un lugar donde va a crecer mi hija. A veces cuando expreso lo que me gustaría que fuese el Pau, no se me entiende. Veo los planos y los proyectos de los políticos, son todos magestuosos. El parque que esta previsto para el Pau es una obra sin duda admirable. Pero sinceramente, yo me conformo con espacios abiertos amplios simplementen con árboles frondosos, un parque infantil y unas canchas. Un lugar donde la naturaleza fuera la protagonista. Prefiero buenos accesos para sacar al polvorón a pasear a la Bouza, o a la avda de Castelao .... y no me gustan nada los pasadizos subterraneos.


Pero a pesar de todo, mi casa es un hogar, un refugio donde nos protegemos de los problemas, del estres diario, del tráfico....Me gustan mis vecinos, me da la sensación de que comparten nuestras ilusiones de futuro. Me gusta que todo el mundo te hable aunque sea la primera vez que te vea, me divierte bajar a frutas Lara y cotillear sobre las nuevos negocios que van abrir, me alegra que mi marido se anime a participar en el equipo de futbol "los teixugos", un equipazo sin duda, tienen uniforme y todo.
Como pienso que lo más grande y lo mejor que hice en mi vida, fue al pequeño polvorón disfruto mucho de compartir con mis vecinas las mejores ofertas, hay con alguna de veciñ@s que repasamos todas las tiendas de Vigo.

Me gusta el barrio, me interesan todos los proyectos y leo puntualmente la información de David Trigo. Sin duda, los cuatro años de espera han merecido la pena y aunque muchos pensaron en su momento que estabamos locos, sacrificarse tanto tiene la recompensa de vivir en el que seguramente será uno de los grandes barrios de Vigo.
Os cuelgo la foto del pequeño polvorón con su careto más típico que es el que siempre pone cuando entramos en la calle Teixugueiras.


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