Una niña muy empadrada

Es cierto que mi hija siempre ha tenido un vinculo muy especial con su padre. La suya es una relación curiosa, él es mucho más exigente, estricto e imperativo que yo. El tiempo que pasamos con la niña es básicamente el mismo y los dos participamos activamente en sus juegos.

Pero mi hija en cuando ve a su padre no existe nada ni nadie alrededor. Y desde que su padre ha tomado la decisión de trabajar desde casa para dedicarle tiempo, la situación empeora porque comienza a tener berrinches y ansiedad si no puede estar a su lado.

Mi madre dice que yo era igual y que me duró el proceso hasta los 14 años. No se si dentro del porcentaje de herencia genética que transmitimos a nuestros hijos podemos incorporar información de este tipo, pero lo que esta claro es que la relación padre -hija es muy fuerte.

Hoy hemos decidido que la cria vuelva a pasar algunas tardes con otras personas sin nosotros, al menos para paliar un poco la ansiedad que le produce el no ver a su papi.
Os iré contando nuestros progresos.